Espacio sensorial
Un spa es un lugar para descansar, buscar el equilibrio, combatir el estrés o revitalizar el cuerpo y el espíritu, y para que esto se logre es necesario cumplir con una serie de condiciones.
El spa debe proporcionar un ambiente de armonía y equilibrio a través del diseño, la decoración, la música, los olores, un conjunto que permita una experiencia global y única. Asimismo es necesario contar con un servicio de calidad basado en el tratamiento al cliente.
El término spa ha pasado a ser sinónimo de bienestar integral, mediante el cual se consigue que cuerpo, mente y espíritu armonicen hasta alcanzar el equilibrio. Así, el spa se ha convertido en un sitio para el descanso del cuerpo y el sosiego de la mente. Un oasis para el reposo y el "mimo" en manos de profesionales especializados.
Acudir a un spa implica relajarse dentro de un ambiente armónico, sentir el placer de dejarse consentir, eliminar el estrés, mejorar el aspecto y las condiciones físicas de nuestro cuerpo.
Las principales motivaciones de un cliente para elegir un spa son los productos y servicios que éste ofrece, que sean agradables a la vista, al oído, al tacto y al olfato, así como la relación de calidad, precio y trato cordial. Una vez terminada la estancia en el spa, los aspectos más valorados por los usuarios son el trato recibido, la higiene y el cuidado de las instalaciones.
Fuente: effleurage.com.mx