por Lyda Durango
Y todo gracias a un pequeño dispositivo de código de barras o de identificación por radio frecuencia gracias al cual ya no hay excusa para que los uniformes de sus empleados queden por fuera de la automatización de su negocio.
Vista hasta ahora como una simple pieza de vestir, los uniformes se están convirtiendo en un elemento de diseño, marketing e identidad corporativa sin igual. Pero además está centrando la atención de la industria, ávida de fibras amigables con el medio ambiente, de larga durabilidad y comodidad y diseño para los empleados. Parecen muchas características para ser cumplidas por un simple atuendo pero algunos fabricantes lo están logrando.
“Nuestros estándares de calidad están en muchas ocasiones por encima del promedio de la industria textil”, afirma Gustavo Camissi, gerente general del Grupo Cintas para México. “Y no sólo en la construcción de prendas sino también en la productividad incorporando tecnologías ya sea para la confección, corte, detección de errores, revisión de productos terminados y toda la producción”, agrega. Una de las principales innovaciones tecnológicas que se le atribuyen a este fabricante es el de mejoramiento de las fibras de poliéster. “Le estamos tratando de lavar la cara a la mala imagen y reputación que tenía la fibra de poliéster en el pasado”, explica el señor Camissi.
Moda que no incomoda
Considerada tradicionalmente como una fibra calurosa, dura, áspera y de mala calidad, las prendas de fibras de poliéster producidas por Cintas lucen como una prenda de poli lana o de lino pero con la resistencia y durabilidad de la fibra de poliéster. “Vemos que muchos de los uniformes deportivos ahora son hechos con fibra de poliéster, entonces estamos tratando de volcar esto a la industria de uniformes corporativos”, explica Gustavo. Algunas de las propiedades incorporadas son las de dry fit, moisture control y soil release. Estas son características que las tecnología textil está incorporando cada día más para garantizar frescura y comodidad como es el permitir una mejor absorción de humedad, por ejemplo.Pero de la mano de estas características viene otra que los empleados también están valorando: modernidad en el diseño.
Los nuevos estilos se asemejan a los que pueden encontrarse en un desfile de modas y con mayor razón si detrás de ellos hay nombres reconocidos del mundo de la moda. “Escuchando activamente a nuestros clientes hemos realizado un cambio estratégico fundamental en nuestra empresa donde se están incorporando continuamente numerosas tendencias de moda a nuestra línea de productos de catálogo, logrando con esto un acercamiento del mundo de la moda al universo de los uniformes”, explica el señor Camissi.Cintas cuenta con un equipo de más de 20 diseñadores propios y además trabaja con diseñadores externos de renombre para crear colecciones exclusivas en las que el cliente requiere que sus diseños sean elaborados por algún diseñador en particular. Entre esos nombres se encuentran Calvin Klein, Michel Coors, Lafayette 148 y Teresa Bajandas, entre otros.
La primera impresión
Si bien la limpieza y orden con que los empleados lleven sus uniformes registran una primera impresión en los usuarios, la importancia de la apariencia va más allá. Ese atuendo se convierte en un elemento que no solo pasa a embellecer todo el diseño del hotel sino que actúa como una importante herramienta de motivación, comunicación e identidad corporativa.
“Tenemos el convencimiento de que la gente que utiliza uniformes no sólo está utilizando ropa sino que ayuda a transmitir el concepto que el hotel quiere proyectar”, comenta el señor Camissi. “Los uniformes promueven el mejor desempeño laboral y proporcionan una sensación de pertenencia al lugar que disminuye los índices de rotación de personal”, agrega.
Pero en algunas ocasiones encontramos que lo que empieza muy bien termina muy mal y el proceso de los uniformes es un ejemplo de ello. Desde su fabricación hasta la finalización de su vida útil ha habido tradicionalmente un agujero que ha impactado negativamente la gestión del hotel. Por fortuna hay disponibles soluciones tecnológicas que permiten acercar la lupa a todo lo que tenga que ver con los uniformes, desde su compra hasta su reparación pasando por limpieza y rastreo de ubicación.
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Desde el cuarto de control
Como parte de la importancia adquirida por el departamento de uniformes dentro del hotel, las soluciones tecnológicas para apoyar la gestión de esta área no se han hecho esperar. Es así como el sistema de administración de inventario de uniformes de Invotech está siendo usado por alrededor de 300 hoteles en 10 países alrededor del mundo y Latinoamérica está despertando ante los beneficios de esta herramienta. De esta forma, el GIMS (Garment Inventory Management System) de Invotech es el sistema de administración del departamento de uniformes más ampliamente utilizado en todo el mundo.
Por medio de dispositivos de códigos de barras o de identificación por radio frecuencia el GIMS identifica piezas de uniforme individualmente y eficientemente rastrea su ubicación y movimientos. “GIMS maneja todos los aspectos del departamento de uniformes incluyendo rastreo de ubicación, inventario, cantidades de limpieza y costo, compras, ventas, reparaciones y más”, explica Jeff Welles, vicepresidente de Invotech Systems.
Para el proceso de limpieza, por ejemplo, todo empieza con la instalación de un código de barras o un pequeño dispositivo de identificación por radio frecuencia de 13.56 MHz que permite el procesamiento simultáneo de múltiples ítems. Los sellos de códigos de barras pueden durar toda la vida útil de la prenda mientras que los chips de RFID pueden ser reutilizados cuando la prenda ya esté muy gastada o sea desechada.
El paso siguiente es que los lectores de códigos de barras o de los chips de RFID escanean la prenda. En el caso de los lectores de los chips, Invotech proporciona un contador que muestra cuántos ítems fueron leídos en el lote y la cantidad total de prendas escaneadas. En el caso de las prendas que regresan del lavado, Invotech puede instalar una antena especial a través de la cual pasan todas las prendas para ser leídas al mismo tiempo. Alternativamente una antena vertical puede ser usada para leer múltiples prendas o ganchos simultáneamente.
Automatización total
El éxito de esta solución ha dado lugar a una nueva opción de gestión dentro del hotel, se trata de la Solución de Administración del Cuarto de Uniformes. Para gestionarlo solo hacen falta tres componentes: proveedor tecnológico, proveedor de uniformes y hotel. Esta composición crea un equipo ganador para la gestión del área de uniformes y especialmente para los proveedores que brindan un servicio adicional a sus clientes. “Cintas ha encontrado una oportunidad de estrechar lazos con sus clientes y ha dado un paso adelante innovando con un nuevo servicio que es el manejo del cuarto de uniformes”, explica Gustavo Camissi, director del Grupo Cintas para México.
De paso se abre un nuevo negocio en el sector hotelero. Pues el proveedor tecnológico vende el software al hotel y las licencias correspondientes, el hotel adquiere el sistema y la franquicia, y Cintas se encarga de operarlo. “Creemos que esta área de negocio tiene grandes oportunidades debido a la sencillez de uso y efectividad de control que proporciona sobre un activo tan importante como son los uniformes”, explica el señor Camissi.
Departamento de recursos humanos, lavandería y compras se relacionan por medio de esta herramienta gracias a su interfase. “En el caso de GIMS-Laundry Edition es un programa especialmente diseñado para rastrear los uniformes por medio del proceso de lavandería y automatización de facturación en los diferentes hoteles”, explica el señor Welles. Además GIMS hace interfase con diferentes sistemas de administración del hotel como recursos humanos, contabilidad, compras y nómina.
“Los hoteles que no usan GIMS tiene muchos problemas tratando de gestionar una operación eficiente de su departamento de uniformes. Estos hoteles generalmente desconocen cuáles son sus cantidades de uniformes y las tallas en las cuales los uniformes están localizados en cualquier momento”, explica el señor Welles. “Además, cuando los uniformes están perdidos no pueden responsabilizar al empleado o al área de limpieza y cuando compran nuevos uniformes ellos con frecuencia compran la talla incorrecta o las cantidades que no son”, explica.
Estas son solo dos consecuencias directas de no tener más control sobre esta área y sobre todo de hacer de ella una de las pocas dentro del hotel donde las tareas se realizan de forma manual. Llegó la hora de automatizar el departamento de uniformes, los ahorros en tiempo y costos lo ameritan.
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