En los hoteles las habitaciones representan el círculo interior de seguridad, por lo tanto, las cerraduras y cajas fuertes deben ser cuidadosamente elegidas para garantizar mayor protección al huésped y sus objetos.
Hoy con los avances tecnológicos y donde el robo de identidad cada vez es más frecuente, la biometría es la tecnología que se impone a nivel mundial. Aunque poco desarrollada en la industria de la hospitalidad en Latinoamérica, avanza lentamente en ese mercado. Sin embargo, esta nueva tendencia que promete mayor seguridad ha suscitado diferentes reacciones por sus elevados costos y falibilidad.
“La biometría no es recomendable para uso a nivel hotelero, hay que tener en cuenta que este sistema aún no está completamente desarrollado. La biometría podría funcionar donde no se cambia el usuario como en la puerta de una oficina o de una cajilla personal, pero a unos costos supremamente altos. La seguridad a nivel hotelera puede relacionarse únicamente a los sistemas convencionales de cerraduras electrónicas de banda y proximidad.”, explicó Augusto Santos López, director comercial de Onity, compañía dedicada a la fabricación de cerraduras.
Tecnología tradicional vigente
Las cerraduras electrónicas, tarjetas inteligentes con contacto y tarjetas de banda magnética, siguen siendo las más usadas en los hoteles por brindar un máximo control en el acceso, por versatilidad y precio.Según Glenn Peacock, director de marketing de Saflok, (proveedora de soluciones de control de acceso), las tarjetas de contacto y tarjetas inteligentes son las preferidas. Sin embargo, las propiedades de lujo están optando por tarjetas inteligentes sin contacto para las habitaciones.
Alexis Hernández, director de exportaciones de LOC International Inc. (proveedora de soluciones de seguridad para la industria de la hospitalidad), comenta que las tarjetas inteligentes sin contacto son algo nuevo todavía. Aseguró que existe un 90% de demanda de cerraduras clásicas por parte de los hoteles, pues el huésped ya está familiarizado con esa tecnología y es algo por lo que fácilmente puede pagar.
Pensar en la seguridad en la habitación y los elementos que en ella deben instalarse para garantizar la estadía del huésped, sería hablar de condiciones especiales. Es por eso que Peacock recomienda para los hoteles el uso de cerraduras certificadas por el BHMA, Builders Hardware Manufacturers Association. ”Esta certificación refleja la durabilidad de los productos y una construcción superior. También recomendamos seleccionar las cerraduras con el deadbolt automático.”, indicó. Este último es un sistema de cierre automático donde el picaporte dispara automáticamente la palanca al alojarse en el marco de la puerta como si se hubiera cerrado la puerta con llave.
Cajas fuertes y discapacitados
La presencia de una caja fuerte en los cuartos es otra característica de un hotel con un plan de seguridad consistente. Según Alexis, el diseño y la concepción de una caja de seguridad no es un secreto para nadie. “Al igual que en las cerraduras electrónicas, la diferencia está en la calidad de los componentes y los materiales utilizados para su fabricación. Estos son los aspectos que debe considerar el cliente a la hora de comprar e increíblemente es al que menos atienden.”, dijo.
Para los huéspedes con capacidades especiales, la industria de la seguridad ha diseñado productos que facilitan el uso para este tipo de personas. LOC International Inc. ofrece cerraduras electrónicas que emiten una señal visual y sonora para confirmar el reconocimiento de la tarjeta. Por su parte, las cajas de seguridad están equipadas con teclados homologados ADA, American Disability Act, que generan una confirmación visual y sonora en las operaciones de apertura y cierre. Nuestra línea Supreme de cajas de seguridad está equipada con una luz automática interior para hacer más sencilla el uso por parte de débiles visuales y clientes de avanzada edad.”, señaló Alexis Hernández.
Espere artículo ampliado en la edición 3-6 de Gerencia de Hoteles.
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